Soda Stereo: Miles de fanáticos de Ecuador alucinaron con su ritual de simbolismo musical

La banda argentina compuesta por Gustavo Cerati (cantante y guitarrista), Zeta Bosio (bajista) y Charly Alberti (baterista), divirtió al público en un espectacular escenario de 50 metros de largo

Los seguidores de la banda salieron satisfechos, tras dos horas de un juego visual conjugado con excelente musicalización. El histórico encuentro no se repetirá en “Un millón de años luz”
El concierto prometió ser una explosión visual de color, imagen y buena música. Eso y más fue el esperado reencuentro “Me verás volver”. Sí, la presentación del trío argentino, Soda Stereo dejó satisfechos a miles de sus seguidores ecuatorianos que se dieron cita desde muy temprano en Guayaquil, en el estadio Modelo Alberto Spencer, la noche del sábado (27 de octubre 2007).
“Valió la pena la espera, la inversión de tiempo y dinero”, “fue un evento histórico, sin precedentes el cual no había que perderse”, coincidían los asistentes mientras abandonaban alucinados el estadio, tras disfrutar más de dos horas de concierto, la madrugada de este domingo 28 de octubre 2007.
“El concierto fue absolutamente simbólico. Fue la última vez que una banda icono del rock latino entonaba sus míticos acordes”, decía Javier Polo, mientras desde la cancha coreaba cada una de las canciones el repertorio, junto a sus mejores amigos de la universidad.
Para Anita Sánchez, significó un reencuentro de épocas, una simetría de música y color que exitaban los sentidos en cada canción. “Fue un abrazo, una caricia a los sentidos, fue un momento para celebrar una partida histórica con el gran amor de mi vida”, decía con una alegría desbordante, mientras abrazaba fuerte a su pareja.
Unas 27 canciones fueron coreadas por los fanáticos de la banda, que llegaron de distintas ciudades del país, para este único reencuentro musical con el grupo considerado como un clásico del rock latinoamericano de los años 80 y 90. El trío, desde un escenario gigante interpretó son sobriedad -en tres partes- la mayoría de sus clásicos: “Nada personal, “Trátame nuevamente”, “Sobredosis de TV”, “De música ligera”, “Persiana americana”, “Cuando pase el temblor”, “Un millón de años luz”, “En la ciudad de la furia”…
El evento arrancó con “Juegos de Seducción” y terminó con otra inmortal: “Nada personal”, que fue cantada por los asistentes a todo pulmón, mientras iluminaban con sus celulares, a modo de velas, todo el estadio. En ese momento no importó nada, ni la larga espera, ni las molestias por el mal sonido escuchado durante la apertura musical del grupo guayaquileño de rock (pasadas las 19h30), ni nada. Claro, faltaron otras que siguen en la memoria del público como: "Canción Animal", "Signos", "Te hacen falta vitaminas", "dietetico", por citar algunas.
Con una impresionante luna llena, a media noche, y con la imponente voz de Gustavo Cerati (vocalista y guitarrista) diciendo: “Gracias totales”, el recital llegó a su fin. Los seguidores de Soda, en un gran número provenientes de Quito, terminaron su fiesta tomándose los bares y restaurantes de “La ciudad de la furia”...