Soda Stereo transportó a los angelinos a otra dimensión

Los Ángeles -- Los tres pibes de Buenos Aires se juntaron a tocar de nuevo. Soda Stereo anunció su reencuentro -por un año nada más- y una gira que los llevó el miércoles pasado hasta el Home Depot Center de Los Ángeles.
Con "Me verás volver" los tres músicos llegaron hasta un estadio ansioso de fanáticos de los viejos tiempos -cuarentones de la mano de sus hijos- y adolescentes muy nenes todavía para comprarse una cerveza.Pero todos, sin excepción, aclamaron y cantaron los temas que hicieron brillar una vez más al trío que decidió juntarse después de 10 años de separación.Soda Stereo abrió la noche con "Juego de seducción". Siguió con algunos temas de sus primeras producciones como "Tele-Ka". Vinieron unos temas más y con "Texturas", de "Dynamo", se terminó de romper el hielo. Gustavo Cerati increpó a la gente y con su tono inconfundiblemente porteño les preguntó: “¿Piraron mucho?”, lo que en Argentina significa si ya estaban enloquecidos y en otra dimensión.Y es que la pregunta cabía.
Soda Stereo estaba en otro plano.
La armonía rítmica de Cerati, Zeta Bosio y Charly Alberti fue otra vez mágica y se alimentó por una puesta en escena imponente a cargo del virtuoso Martin Phillips (el mismo que montó escenarios para grandes como Daft Punk, U2 y Nine Inch Nails, entre otros).
En las dos horas y media de concierto, Soda Stereo hizo un repaso a dos décadas de rock en unos 30 temas donde no faltaron clásicos como "Persiana americana", "En la ciudad de la furia", "Hombre al agua" y otros más pop como "Zoom".
Pero el trío dejó algo claro: ellos tocan rock y eso fue lo que escucharon los miles de espectadores que quedaron extasiados y con gusto cuando Cerati dijo “Gracias” y el trío se fue del escenario tras el último beat de "Música ligera".
El final del show fue casi como aquel 1997 memorable en el estadio argentino de River Plate, donde con un “gracias totales” dejaron a la gente con ganas de más.
Y en el Home Depot Center pasó lo mismo. La gente pidió más, y tanto, que Soda Stereo no aguantó y Cerati prometió otras cuatro antes de cerrar definitivamente la noche. Volvieron así con temas que no podían obviar como "Nada personal" y "Ella usó mi cabeza como un revolver". Así se fue Soda Stereo. Valió la pena esperar 10 años por 150 minutos de delirio y muchos recuerdos.